Los mejores Restaurantes, tiendas, heladerías italianos en Barcelona
ESTE MES QUEREMOS COMPARTIR CON NUESTROS USUARIOS UN ARTÍCULO DE LA REVISTA GUIA DEL OCIO QUE ES MUY INTERESANTE. GRACIAS A ESTE ARTÍCULO PODÉIS CONOCER LOS LOCALES MÁS INTERESANTE DÓNDE DISFRUTAR DE LA CULTURA ITALIANA EN BARCELONA
La cocina italiana nunca falla: a todos nos gusta y nos sienta bien. Por este motivo esta semana hemos salido en busca de los mejores restaurantes italianos de la ciudad y estos son nuestros favoritos
Xemei. Venecia en modo 'vintage'
Este establecimiento que cae decididamente simpático, ubicado en una carismática calle en lo alto del Poble-Sec, se ha consolidado como uno de los mejores de la ciudad gracias a su cocina especializada en la región del Veneto más casera imposible y a la simpatía de su equipo (echen un vistazo a su página web y sabrán a qué nos referimos) y el bullicio que hallamos siempre en su interior.
El local. Pequeño y con una terracita más que apacible, presenta un agradable interiorismo vintage que dota al conjunto de un carisma que no se sabe exactamente de dónde procede.
Básicos. Pese a que la madre del cordero en Xemei suele ser su apartado de sugerencias (escrito en un papel a mano y que cambia prácticamente a diario en función del mercado, en este caso el de la Boqueria, y la lonja), hay unos cuantos básicos que siempre encontramos: los spaghetti con sepia, el bacalao mantecato, el hígado a la veneciana, las sepionette de playa con polenta y los bigoli con anchoas y cebolla.
La especialidad. Entre sus postres brilla con luz propia el tiramisú casero, siempre fijo junto a la tartaleta rellena de crema pastelera y (ahora) fresas. El resto, como su carta, van variando en función de la estación, del día y del talante del personal de cocina.
No te pierdas... Hace alrededor de un año, cuenta con una sala privada para unas 10-15 personas.
La Locanda. Como en la Italia de antaño
El nombre de este restaurante es toda una declaración de intenciones: debe su nombre a las casas de comidas italianas que ofrecían alojamiento y comida a los viajeros. Cocina clásica, casera, y respeto hacia las recetas tradicionales del país vecino son las bazas de este restaurante
El local. Moderno, luminoso, muy agradable. Su interiorismo, sobrio y muy cuidado pero neutro, consigue su objetivo: centrar nuestra atención en los manjares de su extensa carta.
Básicos. Tienen un apartado de pizzas rojas (con tomate y mozarella) y otro de pizzas blancas (cuya masa está cubierta por crema de tres quesos y mozarella). Cuentan, además, con un apartado dedicado a las ensaladas y otro a los calzone, por no hablar, claro, de sus numerosas opciones de primeros platos (pasta, risotto, etc.) y de segundos, apartado en que destacan los scaloppine de pechuga de pollo aderezados con una salsa a elegir, además de carnes a la brasa.
La especialidad. Es difícil decidirse, pero si somos neófitos recomendamos iniciarnos en los placeres de La Locanda con una de sus pizzas.
No te pierdas... Encontramos diversos menús a partir de 20 €, mínimo para dos personas, que nos permitirán aproximarnos a la cocina de este restaurante. Incluso tienen uno que incluye paella y sangría. Cuentan también con una completa carta de vinos italianos y otra de cócteles.
Buoni Amici. El auténtico gusto de las tres venecias
Los platos de pasta, algunos dedicados a personajes conocidos, servidos siempre con una impresionante riqueza de matices en sus salsas e ingredientes, los postres caseros o los vinos italianos de su bodega son algunos de los motivos por los que este restaurante ha conseguido una notable clientela fiel a las creaciones del chef Daviano Neri.
El local. Luminoso, tranquilo y elegante. Un espacio perfecto para convertir la comida o la cena en la mejor pausa del día.
Básicos. Los rigatoni 7 squali, unos macarrones grandes con cebolla, tomate, salchicha troceada, ceps, crema de leche y un toque picante de guindilla; el bistec a la fiorentina (Tibón), una pieza que tiene el entrecot a un lado y el filete al otro, y que se sirve sobre una piedra acompañado de ensalada; y el risotto con mezcla de setas.
La especialidad. El restaurante prepara una deliciosa carta con la trufa de temporada (blanca, negra...). Su platos son verdaderos referentes para los amantes de la gastronomía.
No te pierdas... Su menú al mediodía, dedicado cada semana a una región diferente (Lombardia, etc.), con cuatro primeros y cuatro segundos a elegir, postre y bebida. De lunes a viernes.
Piazze d'Italia. Tradición puesta al día
Revisar la cocina italiana, ofreciendo sabores tradicionales y propuestas actuales con una fresca materia prima y de temporada. Esta vendría a ser la filosofía con la que Nicola Marino ha cuidado la carta de este veterano restaurante.
El local. La historia, los reconocimientos y la filosofía del Piazze d'Italia recorren sus paredes. Un local muy sencillo en el que disfrutar de la comida sin agobios y que dispone también de terraza.
Básicos. Entre las pastas destacan platos como los linguini neri al bogavante, mientras que entre las pizzas más completas se encuentran la Veneta, con salchicha , pimiento y berenjena, y la Tedesco, con cebolla confitada, queso taleggio, mozzarella y tomate.
La especialidad. La tarta de ricotta y naranja y el tiramisú de Nutella.
No te pierdas... Las recomendaciones de su carta de vinos.
Massimo. Cocina regional muy elaborada
La carta de este restaurante acoge recetas procedentes de distintas regiones de Italia abarcando casi toda su geografía y presentando unos platos autóctonos sin elaboraciones complejas. No echarás de menos las pizzas porque sus platos son muy tradicionales y saben 100% a Italia. Además, está abierto incluso a la hora del desayuno.
El local. En pleno Eixample Esquerre, la decoración de este restaurante está cuidada hasta el mínimo detalle, el comedor es muy acogedor y con un aire provenzal que transmite muy buenas sensaciones.
Básicos. Puedes elegir entre un un amplio surtido de pastas y sus respectivas salsas para acompañarlas. Por ejemplo, los raviolis caseros hechos a mano por el mismo chef y rellenos con bogavante. También tienen buenos risottos, las carnes como la tagliata, carpaccios, embutidos como el speck, sandaniele...
La especialidad. El atún en costra de pistacho acompañado de sandía y menta.
No te pierdas... La mejor delicia de este restaurante es el tiramisú casero.
Le Quattro Stagioni. Cena al aire libre
A veces apetece darse el lujo de poder cenar al aire libre sin ruidos, ni el humo del centro de Barcelona. Y este restaurante precisamente cuenta con una terraza que lo convierte en el lugar idóneo donde disfrutar de una cena tranquila con la sensación de estar alejado de la ciudad. Además, con cada estación varía la carta y se renuevan las recetas ofreciendo productos frescos y de calidad.
El local. El edifico (situado en la zona alta de Barcelona) es una antigua torre con jardín que cuenta, además, con una una terraza al aire libre. Por otra parte, los comedores interiores son muy luminosos y tienen unos colores claros que hacen que el ambiente sea relajado.
Básicos. Ensaladas creativas, como la de buñuelos de txangurro, hinojo, espinacas, pimientos asados y mayonesa de curry; platos de pasta muy elaborados; pescados como el rodaballo o el bacalao preparados de forma casera y una extensa carta de carnes.
La especialidad. Carpaccio de ternera Le Quattro Stagioni.
No te pierdas... La bodega de este restaurante tiene una gran variedad de vinos, muchos de origen italiano, sobre los que te aconsejará el maitre Mario Rodríguez para acompañar tus platos.
Gravin. Un ambiente muy casero
Esta trattoria transmite la esencia de la Italia tradicional y te hace sentir como si realmente estuvieras allí con un servicio muy cercano y personalizado. Además, los productos frescos de mercado son la base fundamental de su carta que convierte cualquier receta tradicional y sencilla en algo exquisito con una presentación impecable.
El local. Se trata de un restaurante informal en el barrio del Born en el que la madera usada para la decoración y la baja intensidad de la iluminación hace que el comedor tenga un ambiente muy cálido y familiar.
Básicos. La cocina es típicamente italiana con recetas caseras aunque no incluye pizzas. Tienen platos de pasta como los tagliolini al limón, orecchiette alla Barese o gnocchis. Aunque si te apetece algo más ligero, opta por las berenjenas ahumadas. Además, como postre puedes elegir entre una suculenta pannacotta o un delicioso coulant de chocolate con coco rallado.
La especialidad. La burrata de Apulia es uno de los básicos más tradicionales.
No te pierdas... Los rollitos de carne de toro con mousse rellena de queso de cabra, la carne es muy tierna y está hecha al punto.
Fabián. El mejor pizzero
Fabián Martín no es un tipo cualquiera: ha sido Campeón del Mundo, se dice pronto, en materia pizzera, además de haber ganado diversos galardones en España y Europa. Y, damos fe, son más que merecidos: sus pizzas parecen venir de otro mundo. Eso sí: nada de pasta, sólo hay pizzas.
El local. En plena Via Laietana, Fabián regenta un local sin pretensiones, agradable, amplio, siempre animado y bullicioso, cuya luminosidad (que tenemos que agradecer a sus anchas cristaleras) le dota de una envidiable alegría en los días soleados.
Básicos. El propio Fabián nos recomienda iniciar el ágape con un tartar de tomate (14,50 €), seguir con una margarita napolitana, elaborada con ingredientes procedentes de esta zona (18 €) y acabar con un postre propio que no tiene desperdicio: los churros de masa de pizza con nata y chocolate.
La especialidad. Aunque encontramos pizzas a partir de 10 €, todas ellas elaboradas con ingredientes de calidad, aquí encontramos también una pizza de 50 €, una auténtica delicatessen: la pizza de trufa. Y otra marcianada de Fabián que recomendamos encarecidamente es su rico manguisú (tiramisú de mango).
No te pierdas... Sus ofertas, si es que tu bolsillo no se ajusta a los precios de su carta, más elevados que la media. Tienen una oferta de mediodía entre semana (pizza, bebida y postre a 10 €) y otra de noche de lunes a jueves (pizza y bebida a 10 €). Si nos apetece pasta, Fabián también la toca, pero sólo en su nuevo local de Maremagnum.
Specchio magico. Una clientela vip para uno de los grandes
Sin hacer demasiado ruido pero con una filosofía sólida consistente en respetar al máximo las recetas tradicionales italianas este restaurante se ha consolidado como el bastión de la cocina italiana en Gràcia, que ha logrado conquistar (sabemos del tirón de este tipo de datos) a gente como la Coixet o Buenafuente.
El local. Con las paredes rebosantes de cuadros y coronado por un grandísimo espejo, Specchio Magico tiene el aspecto de una trattoria más, sin ostentaciones, sin alardes decorativos ni nada que no sea tener la mirada fija en facturar una cocina impecable que justifica un precio de carta que supera la media.
Básicos. Recomendamos iniciar el ágape con uno de sus antipasti, por ejemplo la parmiggiana de melanzana e zucchini, verdure al aceto balsámico e foie-gras, tan abundantes que son perfectos para compartir y seguir con uno de sus platos de pasta, la especialidad de la casa. Hágannos caso y dejen hueco para los postres.
La especialidad. Aunque hay un interesante apartado en su carta titulado I secondi, lo cierto es que en Lo Specchio brilla la pasta fresca por encima de todo, impecablemente cocinada. Las opciones son tantas y tan maravillosas que se nos hace difícil decantarnos por una de ellas.
No te pierdas... Su burrata, espectacular, ideal para combinar con un buen Chianti o con cualquiera de los vinos italianos de su interesante carta.
Tramonti 1980. ¿El mejor tiramisú?
Un habitual en cualquier ranking de cocina italiana que se precie, el Tramonti puede presumir de muchas cosas, entre ellas de llevar más de tres décadas en la brecha y de destilar esa elegancia tan propia de Italia tan admirada en el mundo entero.
El local. Su aspecto elegante y agradablemente atemporal hace de Tramonti un lugar que no pasa de moda, más similar a un club de amigos que a un restaurante, y en el que uno siempre se siente a gusto.
Básicos. Las pastas, siempre aderezadas con productos de temporada, son una delicia, pero en Tramonti cobran especial fuerza sus arroces, muy bien facturados, y un apartado de segundos en que la tagliata hará las delicias de los más carnívoros.
La especialidad. Tal vez los fans acérrimos de Tramonti, que sabemos que los hay a cientos en la ciudad, nos maten cuando destaquemos por encima de sus numerosas delicatessen gastronómicas un tiramisú de auténtico escándalo.
No te pierdas... Si quieren hacerse una idea del nivel que alcanza este restaurante, echen un vistazo a su página web, que cuenta con fotos de gran parte de los platos de su carta. Se les hará, literalmente, la boca agua, pues ya saben lo que dicen de que una imagen vale más que mil palabras.
Il Mercante di Venezia. La italia rococó
Céntrico, a dos pasos de la Rambla y a dos del mar, este restaurante es todo un clásico al que avalan, entre otras muchas cosas, un comedor siempre a rebosar en el que encontramos de todo, pero especialmente muchos grupos.
El local. Deliciosamente barroco, inspirado en un palacio veneciano del siglo XVIII, con sus candelabros, sus cortinajes, su iluminación tenue y un aura de tiempos pasados.
Básicos. La carta es amplia y bien elaborada: cuenta con un apartado de ensaladas y otro de sopas, pastas frescas y gratinadas, pizzas, carnes, pescados, carpaccios...
La especialidad. Muy apreciados por la parroquia son los gnocchi caseros, que pueden ser al pesto, a la boloñesa, a los cuatro quesos o ai funghi porcini, a precios más que razonables, que no superan los 10 €. También tienen una selección de pizzas especialidad de la casa, entre las que encontramos, por ejemplo, la Tre Venezie, tan adecuada al espíritu del local
No te pierdas... A nosotros nos fascina su espectacular melanzana alla parmiggiana, aunque lo cierto es que su carta es tan amplia que hay gustos para todos. Difícil de igualar.
Tiendas
Además de restaurantes donde probar buena comida italiana, hay multitud de tiendas que venden esos productos para que te los lleves a casa. Una de ellas es Da Giorgio, que ofrece una amplia gama de productos delicatessen de alta cocina italiana como mortadela con trufa o las especialidades en pasta fresca rellena, con una novedad este mes: los quadrotti de mozzarella de búfala, tomate seco y albahaca. Ofrecen, además, un menú de 7,5 € con dos platos a elegir. En Pastaluego te traen de Italia las recetas de las nonne italianas. En esta tienda encontrarás especialidad en pasta fresca rellena, entre otros de ceps y trufa, queso de cabra y cebolla caramelizada o bacalao, entre muchas otras variedades de pasta. Para intolerancias también tienen variedades hechas con harinas particulares así como pasta blanca (sin huevo). Todo ello hecho artesanalmente.
Y para delicatessen, las que encontrarás en Delizie, donde además de pasta fresca artesanal podrás probar salsas frescas y en conserva, patés, tomates secos y semisecos de Sicilia o aceites de sabores para condimentar.
Otro local que no puedes dejar de visitar es Il Magazzino, donde se combina la filosofía de los productos naturales con sus formas artesanales de elaboración. En esta elegante tienda hay una amplia oferta, además de una zona de degustación. Todas ellas son pequeños paraísos italianos en nuestra ciudad.
Heladerías
Si hay algo tan famoso como la pasta o la pizza italianas son los helados. En Barcelona encontramos bastantes heladerías italianas que, con el inicio del verano, recomendamos visitar para probar sus delicatessen. Una de las más antiguas es Italianos Maximum 1940, que, con más de 70 años de historia a sus espaldas, es un buen referente heladero en la Rambla. Son famosos sus helados con licor, como el after eight (chocolate y menta) o el kingston (chocolate y ron). No muy lejos encontramos otra popular heladería italiana:Giovanni, cuya olor a gofres inunda desde hace varios años la calle Cucurulla, que abrió el señor Giovanni en 1997 y que ahora está en manos de la compañía Artgelatto. Otra heladería italiana en la zona del Gòtic es la popular Gelateria Italiana Pagliotta, abierta por un artesano heladero que proviene de una familia de heladeros y cafeteros italianos, que elabora helados cremosos y de intensos sabores. Sus bestseller son los sabores de toda la vida: stracciatella, turrón, vainilla, chocolate, fresa, limón, etc. Aunque si buscamos un helado de chocolate como nunca antes hemos probado, deberemos dirigirnos a la popular heladería de Gràcia Gelateria Caffetteria Italiana, donde la receta secreta del "chocolate del abuelo", de más de 100 años, encandila a la clientela más fiel. Muchos menos años –una décima parte– es lo que lleva la cadena Amorino en marcha, aunque ya tiene heladerías por todo el mundo. Si pasan por uno de sus tres establecimientos barceloneses, no se pierdan la joya de la corona: el helado l'inimitable, fusión escandalosa de avellana y chocolate que alerta de su otra especialidad, la bombonería. Y si lo que buscan son sabores originales,Gelaaati di Marco puede ser una elección inmejorable. Helados naturales, sin colorantes, bajos en azúcar y grasas y una carta poblada de nombres sorprendentes como chocolate picante, mojito o aguacate, presentados con una ingeniosa decoración. Aunque no podemos hablar de heladerías barcelonesas y no mencionar la Cremeria Toscana, que sirve en sus dos plantas no sólo geniales helados artesanales, también tiramisú, pasteles, cremas, sorbetes y otros postres. Por último, una apuesta segura:DeLaCrem, un pequeño establecimiento con terraza, poseedor de uno de los mejores helados de avellana que pueden probarse.
DIRECCIONES
Restaurantes
La Bella Napoli. Villarroel, 101.T. 93 454 70 56. H: de 13.30 a 16 y de 20.30 a 24 h. Lunes, de 20.30 a 24 h.
Il Buoni Amici. Casanova, 193. T. 93 439 68 16. H: de 13 a 15.45 y de 20.30 a 23.30 h. Cerrado miércoles noche.
Piazze d'Italia. Casanova, 94. T. 93 323 59 77. H: De 13 a 15.45 h. y de 20.35 a 23.35 h. Cerrado lunes todo el día y los martes al mediodía.
Massimo. Vía Augusta 217. T. 93 454 81 46. H: de martes a jueves y domingo de 13 a 15.30 h y de 20.30 h. a 23.30 h. Viernes y sábado hasta las 24 h. Cerrado lunes.
Le Quattro Stagioni. Dr. Roux, 37. T. 93 205 22 79. H: de 13.30 a 16 h y de 20.30 a 23.30 h. Domingo solo mediodía.
Gravin. Rera Palau, 3-5 . T. 93 268 46 28. H: de 13 a 16.30 y de 20 a 23.45 h.
Fabián Martín. Via Laietana, 71. T. 93 301 47 48. H: de lunes a sábado, de 12.30 a 16 h y de 19.30 a 24 h.
Da Luca. Hotel Alexandra. Mallorca, 251. T. 93 467 77 55. H: de lunes a domingo, de 13 a 16 y de 20 a 23 h.
Xemei. Passeig de l'Exposició, 85. T. 93 553 51 40. H: de miércoles a lunes, de 13 a 16 y de 20.30 a 24 h.
La Locanda. Doctor Joaquim Pou, 4. T. 93 317 46 09. H: de lunes a domingo, de 13 a 16.30 y de 20 a 0.30 h.
Tramonti 1980. Avda. Diagonal 501. T. 93 410 15 35 / 93 410 15 86. H: de lunes a domingo de 13 a 16 y de 20.30 a 24 h.
Il Mercante di Venezia. Josep Anselm Clavé, 11. T. 93 317 18 28. H: de lunes a domingo de 12 a 16 h y de 20 a 24 h.
Specchio Magico. Luis Antúnez, 1. T. 93 415 33 71. H: de 13.30 a 15.30 h y de 20.30 a 23 h. Cerrado domingo noche.
Tiendas
Delizie. Balmes, 149. H: de lunes a viernes de 10 a 21 h. Sábado de 10.30 a 14.30 h y de 17.45 a 20.45 h. T. 93 218 33 58. www.delizie.es.
Da Giorgio. Avda. de Sarrià 67. H: de lunes a viernes de 9 a 15 h y de 17 a 20.30 h. Sábado de 9 a 15 h. T. 93 322 86 59.
Pastaluego. Casanova, 197. H: de lunes a viernes de 11 a 15h y de 17.30 a 20.30 h. Sábado y domingo de 11 a 15 h. T. 93 419 40 97.
Il Magazzino. Londres 103. Horario: de lunes a sábado, 9.30 a 21.30h. T. 93 209 42 55.
Heladerías
Italianos Maximum 1940. Rambla dels Caputxins, 78. T. 93 302 30 67. H: de 10 a 23 h.
Gelateria Caffetteria Italiana. Plaça de la Revolució, 2. T. 93 210 23 39. H: de domingo a jueves de 14 a 24.30 h, viernes y sábado 14 a 1.30 h.
Giovanni. Cucurulla, 2. T. 93 317 77 95. H: de 11 a 22.30 h.
Gelateria Italiana Pagliotta. Jaume I, 15. T. 93 310 53 24. H: de 9 a 24 h.
Amorino. La Ramblas, 125 (T. 93 218 83 05. H: de 12 a 1 h); Portaferrissa, 7 (T. 93 412 45 71. H: de 12 a 24 h); C.C. Las Arenas, Plaça d'Espanya, s/n (T. 93 228 98 21. H: de 10 a 22 h).
Cremeria Toscana. Muntaner, 161. T. 93 539 38 25. H: de lunes a jueves de 14 a 24 h, viernes y sábados de 12 a 1 h, domingo de 12 a 24 h.
DeLaCrem. Enric Granados, 15-17. T. 93 124 65 51. H: de domingo a martes de 9.30 a 21 h, de miércoles a sábado de 9.30 a 4 h.
No hay comentarios:
Publicar un comentario